Conociendo la DO Manchuela

Esta semana voy a dedicarle mis entradas a la ya séptima D.O. de Castilla La Mancha, La Manchuela. Y es que, no sólo comencé aquí mi andadura como profesional sino que me unen a ella muchísimos amigos y buenísimos momentos. 



La Manchuela ocupa los pagos situados entre el Júcar y el Cabriel, al sudeste de la provincia de Cuenca y al nordeste de la de Albacete, con unas condiciones edafoclimáticas muy particulares. Los suelos arcillosos con base calcárea mantienen el agua de lluvia caída antes del crecimiento de la uva. La escasa humedad, la ausencia casi total de lluvias entre los meses de mayo y septiembre, y la gran cantidad de horas de sol recibidas durante su maduración, hacen que el riesgo de enfermedades sea mínimo.

Con una superficie de viñedo de aproximadamente 72.000 hectáreas, se ubica a una altitud de entre 600 y 1.100 metros sobre el nivel del mar en un clima continental, influidos por los vientos húmedos del  Levante. Las altas temperaturas diurnas producidas por el viento de poniente y el frescor nocturno de la brisa mediterránea favorecen una maduración lenta y una perfecta formación de los polifenoles de la uva. Los tradicionales sistemas de cultivo de La Manchuela, con unas moderadas producciones dan el marco ideal para garantizar la personalidad y extraordinaria calidad de sus vinos.

Han hecho falta casi cuarenta años para hacer de esta Denominación de Origen una realidad. En la primitiva división oficial de Denominaciones de Origen de Vinos de España, en 1966, ya figuraba este territorio como diferenciado de sus vecinos. En 1997, un grupo de emprendedores viticultores y bodegueros de la comarca, cuyos vinos se acogían a la indicación geográfica de Vinos de la Tierra, iniciaron junto al impulso del Centro de Desarrollo Rural de La Manchuela la creación de la Asociación Pro-Vinos Denominación de Origen Manchuela, convencidos de que esta zona merecía un puesto relevante en el complejo y competitivo mercado de los vinos de calidad. En 2000 tuvo lugar su consolidación al inscribirse en el Diario Oficial de Castilla La Mancha, presentándose en sociedad en 2001.

Hoy día los vinos producidos en La Manchuela no tienen nada que envidiar a los vinos más prestigiosos de España. Prueba de ello son los importantes galardones, tanto nacionales como internacionales, que día a día avalan estos vinos con su prestigio.
Los últimos premios recibidos fueron en el pasado Concurso Mundial de Bruselas, donde se obtuvo la Medalla de Oro por Azua Bobal Roble 2010 de la Bodega Vitivinos, y Medalla de Plata para Vega Tolosa Blanco Selección 2010, de Pagos de Familia Vega Tolosa. En los premios Gran Selección de Castilla La Mancha, obtuvieron el Gran Selección de Oro, el Púrpura Crianza 2008, de la SAT de Pozo Lorente y el Realce Bobal rosado 2010 de Coop. Unión Campesina Iniestense. 

El Comité de Enólogos de la Denominación de Origen Manchuela otorgó en 2009 la calificación de EXCELENTE, y MUY BUENA en 2010, a los vinos de la última añada por su óptimo grado de acidez y su estabilidad.

Los tintos jóvenes son el estandarte de La Manchuela dentro y fuera de sus fronteras. El predominio de la uva Bobal en estos caldos aporta una personalidad única de buena carga tánica y acidez. Con Tempranillo suelen elaborarse vinos con buena aptitud para la crianza media, tanto en barrica como en botella. No podemos olvidar la Garnacha tinta y tintorera, la Cabernet sauvignon y C. franc, el Graciano, la Malbec, Mazuelo, Merlot, Monastrell, Moravia (Agria y Dulce), Petit Verdot y P. noir y Syrah

Los vinos blancos se elaboran mayoritariamente de Macabeo, que produce vinos afrutados, frescos, de una buena acidez. También suelen elaborarse con Albillo, Chardonnay, Moscatel de grano menudo, Pardillo, Sauvignon Blanc, Verdejo y Viognier, jugando sobre todo con fermentaciones en barrica.

Alguna de las bodegas situadas en la provincia de Albacete son: en Alborea, Vinos de Alborea y Coop. San Isidro; en Casas Ibáñez,  Bodegas Ibañesas, Pagos de Familia Vega Tolosa, Coop. Nuestra Señora de la Cabeza y Señorío del Júcar; en Fuentalbilla, Bodega Iniesta y Vinícola el Molar; de Madrigueras, Bodegas Hermanos Torres y la Coop. San Isidro; en Mahora, Cien y Pico y la Coop. San Isidro; de Villamalea, Coop. San Antonio Abad y Vitivinos; en Cenizate, Coop. Virgen de las Nieves; de Pozo Lorente, SAT Santa Cruza de Pozo Lorente (Bodegas Recial) y la Coop. San Gregorio Magno de Navas de Jorquera.
Pertenecientes a la provincia de Cuenca, se encuentran, entre otras: Vitis Natura de Quintanar del Rey, Bodegas y Viñedos Ponce de Villanueva de la Jara; Bodegas Villavid, de Villarta; Finca Sandoval de Motilla de Ledaña y Alto Landon de Landete.

Esta joven Denominación, siempre está a la vanguardia en promociones, eventos y con presencia en ferias y convenciones extranjeras y nacionales, para dar a conocer a un público general la calidad y carácter de sus vinos. Por ejemplo, cada año está presente en la Feria de Albacete a través de un stand informativo, donde ofrece degustaciones gratuitas y toda la información acerca de sus bodegas y cooperativas. A lo largo del año, también se llevan a cabo catas comentadas por algunos de los enólogos más prestigiosos de la zona como D. Rafael Orozco o D. Luís Jiménez, charlas y conferencias sobre marketing y comercio exterior, así como presentaciones de añadas, etc.

La Manchuela posee vinos por descubrir de alta calidad y con muy buena relación calidad-precio. Desde aquí os invito a que, si tenéis la oportunidad de visitar la zona, no dejéis de probar estos maravillosos caldos, originales, singulares y con un amplio abanico de posibilidades, desde blancos frescos o fermentados en barrica, pasando por rosados y tintos de bobal y unas garnachas tintoreras de un color inmejorable.